Tras una semana de servicio en la renovada Línea 1 del Metro de la Ciudad de México, los usuarios han comenzado a expresar sus preocupaciones y demandas relacionadas con la lentitud en los tiempos de traslado y la seguridad en esta importante vía de transporte.
A pesar de la anticipación y las mejoras anunciadas en la Línea 1, los viajeros han señalado una disminución en la velocidad de los traslados en comparación con el servicio anterior. En un recorrido realizado durante la sexta jornada desde la reapertura, algunos pasajeros mencionan que los tiempos de viaje ahora son más largos de lo que solían ser.
Además de la lentitud, varios problemas de seguridad y comodidad han sido destacados por los usuarios. La señora Alejandra Reyes, una usuaria con discapacidad, señaló que ha experimentado dificultades con los elevadores destinados a personas discapacitadas, además de la falta de señalización adecuada en las instalaciones. Esta falta de orientación puede llevar a la confusión y la pérdida de tiempo para los pasajeros.
El ambulantaje, un problema persistente en el sistema de transporte, sigue siendo motivo de preocupación para los usuarios. La Estación San Lázaro, que actúa como un importante punto de conexión con la Línea B y varias rutas de Metrobús, se ha visto afectada por la presencia de puestos de comida y la puerta semiabierta, lo que obstaculiza el acceso y dificulta la circulación de los pasajeros.
La Estación Merced, que conduce al popular mercado del mismo nombre, aún enfrenta el desafío de puestos ambulantes en sus accesos, además de la mercancía colgada de las puertas de la estación, lo que crea un entorno incómodo y poco seguro.
El jueves, en el quinto día de servicio, se produjo una interrupción en la línea cuando un convoy quedó varado entre las estaciones Pantitlán y Zaragoza, lo que causó inconvenientes a los pasajeros y generó preocupación sobre la confiabilidad del servicio renovado.
A pesar de estas preocupaciones, algunos usuarios han tenido experiencias positivas. Rodolfo, que viaja en una silla de ruedas, expresó su satisfacción con la accesibilidad del servicio y lo calificó como “del 10”.
El Gobierno de la Ciudad de México ha anunciado que el próximo tramo de renovación de la Línea 1 se cerrará el 9 de noviembre, lo que plantea la pregunta de si estas preocupaciones serán abordadas y resultados en futuras etapas de mejora de la línea. Mientras tanto, los usuarios esperan mejoras en la eficiencia y seguridad en este importante sistema de transporte público.
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