Redacción Marlone Serrano
La tarde del 10 de septiembre de 2025, una explosión de una pipa de gas sacudió la zona de La Concordia, en la alcaldía Iztapalapa, dejando un saldo trágico: tres personas fallecidas —dos adultos y un bebé— y al menos 70 lesionadas, entre ellas 51 hombres y 16 mujeres. El impacto emocional y social de este hecho ha movilizado a autoridades, cuerpos de emergencia y a la comunidad entera.
Una tragedia que enluta a la ciudad
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, confirmó el número de víctimas y aseguró que el listado de hospitalizados se mantiene en constante actualización debido a los traslados médicos. “Continuaremos de manera estricta con el apoyo médico a las víctimas de este hecho”, declaró en conferencia de prensa.
Entre los heridos, se reportan dos personas aún no identificadas. Las autoridades han solicitado a familiares que acudan a hospitales cercanos para colaborar en el proceso de reconocimiento.
El chofer, con vida, pero en estado grave
Inicialmente se creyó que el conductor de la pipa había fallecido en el siniestro. Sin embargo, el secretario de Seguridad de la CDMX, Pablo Vázquez, informó que fue localizado con vida, aunque en estado crítico. Fue trasladado primero a un hospital en el Estado de México y posteriormente al Hospital Magdalena de las Salinas en la capital.
¿Quién responde por la explosión?
Durante el balance oficial, Clara Brugada señaló que la unidad siniestrada pertenece a la empresa Gas Silza, subsidiaria del Grupo Tomza, propiedad de Tomás Zaragoza Ito. Aunque no se han dado más detalles sobre las condiciones del vehículo ni sobre posibles negligencias, la identificación de la empresa responsable abre una nueva etapa en la investigación.
Apoyo y exigencia de justicia
El apoyo de la gente de Iztapalapa y toda la CDMX, ha comenzado a organizar vigilias en memoria de las víctimas, mientras que familiares de los heridos exigen transparencia y justicia. La magnitud del evento ha reavivado el debate sobre la regulación del transporte de sustancias peligrosas en zonas urbanas densamente pobladas.



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