El Día de Lucha contra la Desertificación y la Sequía se celebra el 17 de junio. El decreto fue creado por las Naciones Unidas para hacer conciencia sobre la importancia de los seres humanos y el planeta.
La desertificación es el resultado de la degradación permanente del suelo provocada por la continua deforestación, la salinización, la escasez de agua y la sobreexplotación de los acuíferos, muchas veces generada por diferentes actividades que causan pérdidas económicas en diferentes partes del mundo.
La sequía representa un cambio o anomalía climática, que ocurre cuando los niveles de agua caen muy por debajo de sus contrapartes en un área geográfica, afectando severamente a todas las especies que crecen y se desarrollan en esa área.
México es uno de los países más vulnerables a la desertificación, lo que significa la degradación del suelo, debido al calentamiento global, el cambio de uso del suelo y el desacato a la ordenación del territorio.
México ha desarrollado una estrategia para combatir la desertificación, que articula 38 programas federales de los cuales el Programa Nacional Forestal (PRONAFOR) es uno de los más destacados en la promoción de la productividad de los ecosistemas terrestres.
Para conmemorar el Día de la Lucha contra la Desertificación y la Sequía, podemos aportar para realizar los cambios necesarios, que minimicen el impacto negativo sobre los recursos naturales del planeta. De esta forma, contribuir a cuidar, proteger, salvar la biodiversidad y la vida en la Tierra.
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