Redacción: Hena M. Andrés Cuevas
Trabajadores del Metro advirtieron que podrían ir a paro si el gobierno capitalino no atiende sus demandas laborales y de seguridad.
El pasado 2 de diciembre de 2025, trabajadores del Metro de la Ciudad de México levantaron la voz para advertir que, si sus demandas continúan sin ser atendidas, podrían realizar un paro de actividades que impactaría varias líneas del sistema. La declaración generó preocupación inmediata entre los usuarios, pues el Metro es uno de los pilares más importantes de la movilidad en la capital.
El sindicato señaló que desde hace meses han solicitado reuniones con las autoridades de la Ciudad de México para exponer una serie de necesidades que consideran urgentes. Entre sus demandas se encuentran la reorganización de plazas, mejores condiciones laborales, entrega de equipamiento adecuado y la atención a zonas del Metro que califican como peligrosas o insalubres. Según los trabajadores, estos puntos no son solo asuntos internos, sino temas que también repercuten en la seguridad y el buen funcionamiento del sistema para todos los usuarios.
Como forma de protesta, empleados han colocado carteles en trenes, pasillos y áreas administrativas con mensajes que buscan llamar la atención de las autoridades. Aseguran que, a pesar de insistir en el diálogo, no han recibido una respuesta formal por parte del Gobierno de la Ciudad de México. Por ello, advirtieron que están valorando movilizarse hacia el Zócalo capitalino como antesala a un eventual paro.
Aunque no se ha establecido una fecha ni se han confirmado las líneas que podrían verse afectadas, la sola posibilidad de una suspensión del servicio ha generado preocupación. Miles de personas dependen diariamente del Metro para trasladarse a su trabajo, a la escuela o a servicios esenciales, por lo que una interrupción tendría un impacto considerable en la ciudad.
El sindicato sostiene que su intención no es perjudicar a la ciudadanía, sino garantizar que el personal cuente con condiciones adecuadas para operar un sistema tan grande y complejo como el Metro. Mencionan que la falta de mantenimiento, los espacios inseguros y el equipo insuficiente también pueden derivar en fallas o incidentes que pongan en riesgo tanto a trabajadores como a usuarios.
Por ahora, las autoridades capitalinas no han emitido una postura definitiva sobre las demandas. Los trabajadores esperan que en los próximos días se abra una mesa de diálogo que permita evitar un conflicto mayor. En una ciudad donde millones dependen del transporte público, lo que ocurra tras esta advertencia será clave para mantener la operación del Metro de manera estable y segura.
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