Redacción: Regina De Quevedo
J Balvin dio a conocer su relación con Bad Bunny y Residente, reconoció sus errores del pasado y afirmó que los conflictos que los distanciaron nacieron del ego, la presión del éxito y la ansiedad por los números.
En un momento de madurez personal y artística, el artista dejó claro que ya no existen rencores activos y que el reencuentro llegará en cualquier momento, si tiene que llegar, de forma natural. Pronunciar el nombre de J Balvin implica detenerse en Medellín y hablar del reggaetón contemporáneo. Desde esa ciudad, José Álvaro Osorio Balvin convirtió este movimiento local en un fenómeno global y dio inicio para que toda una generación de artistas colombianos domine las listas internacionales.
Todo inició a finales de 2021, cuando Balvin incitó a un boicoteo a los Latin Grammy al considerar que el reggaetón y otras manifestaciones ligadas no estaban siendo reconocidos debidamente por la Academia Latina de la Grabación. En respuesta, Residente lo acusó de falta de coherencia, talento y valores, lo que se extendió más adelante cuando grabó una sesión con Bizarrap en la que hizo énfasis en hacer “comida chatarra”. Todo esto creó revuelo en redes sociales y llevó a que los usuarios tomaran bandos defendiendo a uno del otro.
En 2023, Bad Bunny grabó el álbum Oasis con J Balvin en 2019, y lanzó una crítica hacia el colombiano en su canción Thunder y Lightning, en la que cantó “Ustedes me han visto, siempre ando con los mismos, mientras ustedes son amigos de todo el mundo como Balvin”. Esto comenzó rumores de que existía un distanciamiento entre ambos, especialmente por la manera en que cada uno estaba desarrollando su carrera; mientras el colombiano se tomó un tiempo fuera para priorizar a su familia, el puertorriqueño se volvió un ícono global con la publicación de sus álbumes Un Verano Sin Ti (2022) y Debí Tirar Más Fotos (2025).
J Balvin admitió que lidiar con la expectativa y la frustración le afectó su pico de popularidad, lo que influyó en su conflicto con Residente. “Cuando tuve todas estas situaciones, la situación con Residente o situaciones complicadas mediáticamente, con canciones y cosas que nunca pensé que me iban a suceder, fue muy frustrante porque nunca pensé que me iba a ver en problemas, ni en tiraderas, ni en cosas mediáticas, ni vueltas de esas”, afirmó. En una charla íntima desde su casa en Medellín, reconoció que aquellos conflictos no nacieron del odio, sino de algo más incómodo de aceptar: la presión constante del éxito.
El cantante no promete colaboraciones ni fotos virales; hablo de procesos y no de espectáculos. Recuerda Oasis con cariño y reconoce que las conversaciones que compartieron fueron reales. Por ahora, Balvin parece haber encontrado algo que perdió durante años: la tranquilidad de no tener que demostrar nada en una industria obsesionada con el ranking.
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