El Instituto Nacional Electoral (INE) ha aprobado este viernes que Morena y sus aliados del Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) tengan el 73% de curules en la Cámara de Diputados, superando así la mayoría calificada necesaria para reformar la Constitución sin necesidad de acuerdos con la oposición. Esta decisión ha generado un intenso debate político, ya que la oposición teme que este poder pueda utilizarse para implementar reformas significativas que cambien el rumbo del país.
Con esta nueva configuración aprobada por el INE, el bloque oficialista de Morena tendrá 364 diputados en la Cámara, superando el umbral de las dos terceras partes requerido para modificar la Constitución. Esta mayoría les permitirá avanzar con su agenda de reformas, incluyendo la propuesta de que jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte sean elegidos por voto popular, y la enmienda para que la Guardia Nacional pase al control del Ejército.
Sin embargo, esta decisión no ha estado exenta de polémica. La consejera electoral Claudia Zavala presentó una contrapropuesta que buscaba limitar la sobrerrepresentación del bloque oficialista, pero fue rechazada por la mayoría del Consejo General del INE. Zavala argumentaba que la interpretación del artículo 54 de la Constitución, en la que se basa la distribución de escaños, debía ser más estricta para evitar una representación desproporcionada que podría desbalancear el poder en el Congreso.
Críticas y amenazas de impugnación
La oposición ha reaccionado con fuerza ante esta aprobación. Líderes del PAN y Movimiento Ciudadano han criticado duramente la decisión, calificándola de antidemocrática y prometiendo impugnarla ante el Tribunal Electoral. Según ellos, el reparto de curules no refleja la verdadera voluntad del electorado, ya que partidos como el PVEM, que obtuvo solo el 8% de los votos, se han convertido en la segunda fuerza en San Lázaro.
El representante del PAN, Hugo Sondón, señaló que las diputaciones plurinominales, creadas para representar a las minorías, están siendo utilizadas para otorgar una mayoría artificial al partido en el poder. Por su parte, Dante Delgado de Movimiento Ciudadano acusó al INE de permitir que un partido con escasa representación electoral ocupe una posición desproporcionada en el Congreso, lo que, según él, distorsiona la democracia mexicana.
La defensa del oficialismo: respetar la voluntad popular
Desde el oficialismo, figuras como Gerardo Fernández Noroña del PT han defendido la decisión del INE, argumentando que la mayoría calificada refleja el mandato popular otorgado en las urnas. Según Noroña, las críticas de la oposición no son más que un intento desesperado de frenar las reformas prometidas por la coalición durante la campaña electoral.
Fernández Noroña también criticó las amenazas de juicio político lanzadas por su compañero de coalición, Sergio Gutiérrez, contra los consejeros del INE. Aunque reconoció que podría haber incongruencias en algunas decisiones del INE, insistió en que no se debe proceder legalmente contra los consejeros ni se busca demoler al INE.
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