La columna del día Mayra Núñez

Las mujeres y Picasso

¿Ustedes saben por qué puede ser importante el apreciar arte? 

Según el Prof. Semi Sekir, que es un neurólogo que trabaja en Londres, dice que cuando apreciamos el arte la parte del cerebro que se estimula es la misma que cuando nos enamoramos. 

Cuando sentimos amor por alguien es el resultado de nuestro cerebro dejando salir dopamina, la sustancia química que nos hace sentir bien, la sustancia del bienestar.  

Apreciar el arte es una manera alternativa e interesante de entender la vida, a nosotros mismos y a nuestro entorno. 

A través del arte se muestran aspectos culturales relacionados con diferentes ámbitos humanos como expresiones populares, creencias y tradiciones. 

Y siempre el conocer personajes que han participado dentro del arte nos ayuda a conocer la historia del mundo. 

Muchos de estos personajes a través de su trabajo salen de lo establecido y entonces tocan al mundo. 

Como es el caso del pintor español Pablo Picasso, que sabemos ocupa un lugar particular en la historia del arte, ha sido reconocido como uno de los genios más célebres del siglo XX. 

Pero no vamos a hablar de él como el gran artista admirado y amado por sus admiradores y seguidores. 

Pablo Picasso creó su mundo pictórico en donde su obra es un reflejo de su vida, siempre pintaba a sus amores, musas y modelos. De acuerdo con los sentimientos del pintor en ese momento, las plasmaba en los lienzos a veces con sutileza, pero también con una gran crueldad en donde siempre exponía su espíritu misógino y el ensañamiento contra las mujeres. 

Todas las mujeres de su vida las convertía en sus musas y eran su fuente de inspiración se dice que siempre al iniciar una relación era encantador y muy seductor y todas las mujeres lo amaban con locura que aceptaban todo, la mayoría de sus relaciones fueron tormentosas y cuando encontraba otra nueva inspiración a la anterior la trataba con desprecio y humillaciones.  

Entre las relaciones que tuvo las que más tiempo permanecieron en su vida fueron siete, la primera Fernande Oliver con la que su relación estuvo llena de violencia celos y desconfianza, pero Fernande fue su in inspiración para el famoso cuadro de Las Señoritas de Aviñón  

Posteriormente conoce a Olga Khokhlova, una hermosa y talentosa bailarina rusa primera esposa del pintor de 1917 a 1935, la cual sufrió un permanente deterioro emocional debido al maltrato físico y mental y a las infidelidades por parte del pintor. 

Uno de los primeros retratos donde Picasso pinta a Olga sentada en un sillón, la presenta como una elegante y bella mujer, al paso del tiempo ya los cuadros que pintaba de ella eran como un ser de rostros deformes y cuerpos mutilados.  

Cuando Picasso pintó a Olga pensativa Khokhlova ya no era la única ya había encontrado en Marie Therese Walter una joven de 17 años y el 46 con la cual tenía relaciones a escondidas ya que era menor de edad decía que era la modelo de sus obsesiones eróticas, fruto de esta relación nació su hija Maya. 

Sin embargo, la vida familiar junto a Marie Therese y la recién nacida empezó a molestarle y se desenamoro 

La escritora Stassinopoulos cuenta en su libro que la joven de 17 años llegó a aceptar relaciones sádicas con quemaduras en el cuello. 

La escritora española en su libro “Picasso y las Mujeres” comenta que Picasso se entusiasmaba mucho al principio de sus relaciones, pero cuando la relación ya no le interesaba la imagen de la mujer pintada se deterioraba hasta convertirla en un esperpento. 

A través de varias fuentes de información se descubrió que una de las mujeres que más sufrió la misoginia del pintor fue la fotógrafa Dora María, cuando la conoció estaba encantado con ella, existe la muy famosa fotografía de Robert Capa donde aparece Picasso cargando una sombrilla para tapar a Dora del sol, y podemos ver al gran pintor caballeroso y atento con su amor del momento. 

Como fotógrafa Dora María era la encargada de fotografiar todo se procesó creativo, al paso del tiempo también se le pasó el enamoramiento y rompió con Dora a la que después de haberle prometido una vida llena de caballerosidad y amor la llegó a acusar de ser una persona “excesivamente desequilibrada”. 

Dora María tuvo que ingresar a un hospital psiquiátrico donde se le llegó a aplicar electrochoques en una terrible situación a consecuencia de la relación con Picasso. Un amigo de Dora el poeta Paul Eduard le exigió a Picasso   que la sacara de ahí por ser el responsable de su colapso mental y padecer junto a él, varios episodios de maltrato psicológico y físico. 

En el libro de Arianna Stassinopoulos se lee que a través de sus fuentes de información como Francois  Gilot una de las maltratadas mujeres de Picasso,  Maya la primera hija de Picasso y muchas otras fuentes muy cercanas al pintor, salió el retrato tenebroso de la personalidad primitiva y miserable que vivió oculta detrás del gran artista. 

Su personalidad, sus enfermedades patológicas y sus excéntricos caprichos, destruyó a las personas cercanas a él, 

Su última esposa se pegó un tiro en la cabeza debajo de las sábanas, una de sus amantes se ahorcó, otra se volvió loca, un hijo se envenenó y así continúa una lista de las personas que vivieron y amaron a este personaje. 

Creo que debemos precisar que Picasso mantuvo este tipo de relaciones con sus esposas y amantes dentro de un contexto de principios del siglo XX en el que las mujeres dependían mucho de los hombres, y las circunstancias de esa época hacían que las mujeres lo permitieran. 

 

¿Se le puede admirar como un gran artista, cuando en su vida personal fue un misógino y un ególatra? 

Mayra Nuñez P. 

Galeriamayra2@gmail.com 

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