El presidente Andrés Manuel López Obrador negó que la Sedena haya realizado actividades de espionaje tras enterarse de que el grupo espió a un defensor de los derechos humanos en Tamaulipas y en cambio atribuyó al Centro Nacional de Inteligencia (CNI) la realización de la investigación y recopilación de inteligencia para evitar recurrir a la fuerza.
“Se tiene que hacer investigación, que no espionaje que es distinto, el Instituto de Inteligencia (CNI) hace investigación, porque nosotros sostenemos que es muy importante hacer la investigación, inteligencia, para no usar la fuerza”.
El titular del Ejecutivo aseguró durante una rueda de prensa que el trabajo realizado por el CNI y la SEDENA era legal.
El presidente López Obrador manifestó que está al tanto del trabajo de inteligencia que se realiza en coordinación con el CNI, el cual se realiza con el propósito de conocer movimientos, operativos de seguridad y delincuencia organizada, respecto de las escuchas telefónicas a un defensor de derechos humanos y tres periodistas a través del malware Pegasus.
“El caso que está mencionando de este defensor de los derechos humanos fue aquí denunciado por un compañero de ustedes señalando lo que tiene presuntos vínculos con grupos de la delincuencia en Tamaulipas, y aquí dijimos que eso no nos correspondía a nosotros”.
Destacó que no hay instrucción para espiar a ningún adversario o periodista porque, a pesar de que se trata de un acto de deshonestidad y falta de moralidad, él mismo ha pagado personalmente un alto precio durante muchos años, mismos que sufrió de espionaje por parte de todos los medios, salvo honrosas excepciones.
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