Redacción: Ximena Zarahi Moreno Luna
Cada diciembre, mientras miles de familias se reúnen alrededor de mesas llenas de comida, historias y calidez, las calles de la Ciudad de México recuerdan otra realidad: la de quienes no tienen una red de apoyo, un espacio seguro o siquiera una cena caliente para recibir la Navidad.
Desde 2020, para mujeres trans, trabajadoras sexuales y personas en situación de calle, esa noche ha cambiado gracias a un acto profundamente humano: la Navitrans, una cena navideña organizada por LLECA, una organización dedicada a acompañar a mujeres y a personas LGBT+ en la alcaldía Cuauhtémoc.
Lo que comenzó como una respuesta urgente en plena pandemia se convirtió en un compromiso anual basado en el acompañamiento comunitario. Según explica Victoria Sámano, directora general de LLECA, la iniciativa ha crecido con los años gracias al esfuerzo de voluntarias, vecinas, activistas y del propio refugio de la organización. Este 2025, el objetivo es mayor: repartir 200 cenas para personas que, de otro modo, pasarían la noche solas, olvidadas o incluso en riesgo.
La preparación del evento es un proceso cuidadoso que inicia el 23 de diciembre. Ese día, el equipo de LLECA y las personas que habitan su refugio comienzan la elaboración de los alimentos, afinando detalles para que todo esté listo a las 10 de la noche del día siguiente. La propuesta culinaria combina tradición, cariño y resistencia. El año pasado se sirvió una cena clásica con pavo, pasta y ponche, mientras que, para este año, el menú podría incluir pozole o birria, además de ensalada de manzana, puré de papa y bebidas calientes que reconfortan cuerpo y ánimo.
Pero más allá de los platos servidos, la Navitrans ofrece algo invaluable: presencia. Sámano destaca que muchas de las personas que asisten comparten sentimientos de agradecimiento profundo; para ellas, es una de las pocas ocasiones en las que se sienten acompañadas, vistas y tratadas con dignidad. En épocas donde las emociones pueden intensificarse y la salud mental se vuelve más vulnerable, una noche segura puede significar más de lo que parece.
Para que la Navitrans 2025 sea posible, LLECA invita a la ciudadanía a donar alimentos, desechables y proteínas como pavo, pollo o carne, así como frutas, verduras, arroz, pasta y productos enlatados. Quienes quieran participar como voluntarias podrán unirse a la preparación del 23 de diciembre, información que se publicará próximamente en las redes oficiales de la organización.
El evento se llevará a cabo el 24 de diciembre, afuera del Metro Revolución, Línea 2, en la colonia Tabacalera. Una ubicación simbólica donde, al menos por una noche, la comunidad se convierte en hogar para quienes más lo necesitan.
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