La columna del día Ricardo Burgos

LOS RIESGOS DE GASTAR DE MÁS EN ESTA ÉPOCA NAVIDEÑA

 

Tengo una amiga que está acostumbrada a aprovechar las famosas ofertas de meses sin intereses de los establecimientos comerciales. Me llegó a presumir sus estados de cuenta de tres tarjetas de crédito en las cuales sus registros eran con ese método parcial de pagos hasta que llegó un momento en que se acumularon tanto los gastos que solamente pudo liquidar los saldos mínimos y los montos de deuda se hicieron muy amplios. 

El otro día en un transporte público escuché una plática entre dos hombres jóvenes. Uno de ellos hablaba con toda calma de sus deudas, que estaba en el Buro de Crédito, endrogado hasta el cuello, pero que estaba buscando la manera de comprar los regalos para sus hijos, su esposa y sus suegros en esta época navideña, a lo mejor pedía un préstamo. 

Con diciembre llega la temporada más bella del año –- afirmación de millones de personas en el mundo —, el tiempo de recibir aguinaldo, compensaciones, comisiones por vacaciones, mejores ventas para quienes se dedican al comercio de todo tipo, a la industria, al turismo y a muchas otras actividades de consumo masivo.   

Hay mucha gente que tiene la solvencia para hacer compras sin limitaciones, pero también hay personas que se gastan los ingresos extras y hasta su sueldo sin pensar en las cuestas financieras de los meses siguientes porque ahora ya no es solamente en enero. Y es que cuando tenemos dinero de más se nos hace fácil adquirir bienes y servicios que en muchas ocasiones no necesitamos y por supuesto, usar los plásticos “al cabo lo pagamos en marzo o abril del año entrante” y después a sufrir. 

De acuerdo a una nota del portal Telediario del 16 de noviembre pasado, los mexicanos vamos a gastar alrededor de 600 mil millones de pesos en Navidad, Año Nuevo y Reyes Magos. Se prevé que al menos el 92.5 por ciento de nosotros vamos a hacer una compra en esta temporada y al 81 por ciento le gusta mucho salir a hacer compras, la mayoría mujeres. En el mismo medio de comunicación se da a conocer que los consumidores compran mayormente en esta época: ropa, alimentos, decoración y bebidas alcohólicas.  

En contraparte, según las casas de empeño, las cuatro temporadas en las que hay mayor afluencia de pignorantes son la cuesta de enero, Semana Santa, el regreso a clases y las compras decembrinas. Los artículos que más empeña la gente son joyas, electrónicos (computadoras, tabletas), celulares, televisores y relojes. 

En temporada navideña nos sentimos obligados a regalar, comprar y a final de cuentas, a gastar de más, pero debemos ser conscientes que lo primero es cuidar nuestra economía para no alargar la dura cuesta de los meses siguientes cuando solamente recibimos el sueldo, sin ningún ingreso extra y sobre todo si tenemos que hacer pagos como renta, tarjetas de crédito, préstamos y otros compromisos financieros que afectan nuestro bolsillo. 

Si puede haga un calendario de ingresos, gastos y pagos; compre lo que pueda, evite meses sin intereses y sobre todo, reflexione antes de adquirir deudas que después no va a poder liquidar.