Redacción: Amairany Ramírez
La Ciudad de México continúa consolidándose como un epicentro cultural y turístico a nivel global, la Autoridad del Centro Histórico (ACH) ha dado un paso importante para reforzar la oferta cultural de la capital, anunciando la creación de siete rutas turísticas que permitirán a los visitantes nacionales e internacionales descubrir los rincones más emblemáticos del corazón de la ciudad.
Estas nuevas rutas, diseñadas para recorrer a pie o en bicicleta, brindan la oportunidad de explorar al menos 120 de los sitios más representativos del Centro Histórico; desde majestuosos museos y antiguos templos hasta edificios que narran la historia de la capital, estos corredores culturales están destinados a fortalecer el vínculo entre la población y su patrimonio, promoviendo un conocimiento más profundo de la rica historia que alberga esta zona.
Durante la conferencia de prensa en la que se presentó esta iniciativa, Manuel Oropeza Morales, coordinador general de la ACH, subrayó el compromiso del Gobierno de la Ciudad de México de preservar, proteger y difundir el valor cultural del Centro Histórico. “Lo importante de estas rutas es que se pueden caminar o recorrer con el sistema de Ecobici. El recorrido más largo es de 3.5 km y el más corto de 1.5 km; para nosotros son importantes porque podemos promover el turismo local, aquí tenemos todo: el Centro Histórico es un centro comercial, cultural, religioso y turístico. La idea es incrementar más el conocimiento de la zona patrimonial”, destacó Oropeza.
Las rutas se han estructurado en corredores temáticos que invitan a los visitantes a sumergirse en diversas facetas del Centro Histórico. Por ejemplo, el Corredor Turístico Alameda incluye paradas icónicas como el Hemiciclo a Juárez, el Palacio de Bellas Artes, y varios museos importantes como el Museo de Arte Popular, el Museo Memoria y Tolerancia, y el Laboratorio Arte Alameda.
Otra opción es el Corredor de los Templos, que se enfoca en la zona nororiente, destacando estructuras religiosas como los templos de Nuestra Señora de Loreto, Santa Teresa la Nueva y Jesús María. Además, incluye visitas a museos significativos como el Museo de las Constituciones y el Museo José Luis Cuevas.
Por su parte, el Corredor Universitario ofrece una mirada a la historia académica y científica de la ciudad, señalando lugares emblemáticos como la Academia de San Carlos, el Palacio de Minería, el Colegio de San Ildefonso, y otros recintos universitarios de gran relevancia histórica.
Estas rutas no solo están pensadas para guiar a los turistas, sino que también tienen un impacto positivo en la comunidad local. El Centro Histórico de la Ciudad de México, ya de por sí un atractivo turístico de primer nivel, ahora se enriquece con esta iniciativa que promete revitalizar aún más la zona. Estas rutas no solo servirán como un recurso valioso para los visitantes, sino que también reforzarán la posición de la capital como un destino cultural de primer orden.
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