En un preocupante panorama, se ha revelado que un total de 152 policías han sido destituidos en la Ciudad de México por actos de violencia contra mujeres policías o ciudadanas. Estos datos fueron proporcionados por la subsecretaria de Desarrollo Institucional de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), Marcela Figueroa, quien destacó la labor de la Unidad Especializada de Género (UEG) en la sanción administrativa de estos agentes.
Desde su creación, la UEG ha atendido un total de 1,084 quejas de eventos de violencia de género perpetrados por policías capitalinos. La subsecretaria Figueroa enfatizó que se ha concluido un 45% de las investigaciones, lo que ha llevado a la sanción administrativa de 407 policías, de los cuales 152 han sido destituidos de sus cargos.
En los meses de abril y mayo, se registraron 67 nuevas quejas de violencia de género en contra de elementos de seguridad, resultando en la sanción de 18 policías y la destitución de un efectivo. Estos datos son alarmantes y reflejan la urgencia de abordar de manera contundente el problema de la violencia de género dentro de las instituciones de seguridad.
En el marco de la presentación del informe de la “Alerta por Violencia contra las Mujeres” en la Ciudad de México, Figueroa destacó que la SSC está implementando una estrategia para la formación de los policías con perspectiva de género. Esto implica la capacitación en cursos como “Atención en casos de violencia contra las mujeres, niños y niñas”, “Canalización de víctimas”, “Género”, “Diversidad sexual” y “Acoso sexual y laboral”.
Es importante reconocer que las mujeres policías están expuestas a diversas problemáticas de violencia de género, tanto en la capital como en otras partes del país. Sufren discriminación, acoso y se les condiciona en sus ascensos, entre otros abusos. Ante esta realidad, la UEG busca fomentar una cultura de denuncia y promover espacios libres de violencia y discriminación para las mujeres.
Es fundamental que las autoridades continúen trabajando en la erradicación de la violencia de género en las instituciones de seguridad, implementando medidas efectivas que garanticen la seguridad y protección de todas las personas, sin importar su género. La destitución de los policías responsables de actos violentos es un paso en la dirección correcta, pero se requiere un compromiso continuo y acciones concretas para lograr un cambio real en la sociedad y en las instituciones encargadas de velar por la seguridad de todas las personas.
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