No es por estresar ni presionar a nadie, pero … ¿Ya caíste en la cuenta de que estamos a siete semanas de cerrar el 2022? Prácticamente tenemos por delante un viernes muy largo, en el que parece que todo va más a prisa que de costumbre y con mayor tráfico también.
Y si, parece que siete semanas son muchas, pero en realidad no lo son tanto y entonces para que no nos agarren las carreras he querido proponerte que hagamos un ejercicio de “evaluación” rumbo al próximo año, para que con calma revisemos cómo nos fue y qué queremos para el próximo ciclo.
Un poco lejos de las listas de propósitos y buenos deseos con los que solemos iniciar el nuevo año quisiera proponerte algunas preguntas para cerrar este año:
· ¿Cuál fue la lección más importante que aprendiste?
· ¿Qué personas fueron importantes para ti y por qué?
· ¿Cuánto te divertiste este año?
· ¿Cuánto te cuidaste este año?
· ¿Qué proyectos se quedaron en el tintero y por qué?
No tienes que responderlas todas, ni ahora.
Toma las que quieras y poco a poco date tiempo de desmenuzarlas, de encontrar tus respuestas, sin atorarte en la sobre exigencia o en las culpas, sólo observa que hay, qué fue lo que sucedió.
Tal vez encuentres que situaciones que fueron pesadas o negativas te dejaron algún aprendizaje o reforzaron ciertas ideas, o, al contrario, rompieron tus estructuras, o te permitieron descubrir cosas que necesitarás en el futuro.
Quizá encuentres que este año trajo para ti personas valiosas, personas que sembraron semillas en tu corazón, personas que iluminaron tu camino de alguna manera especial o personas que con su partida abrieron caminos y espacios para otras, o para ti mismo (a).
Es probable, que después de dos años muy difíciles por el asunto de la pandemia en este tercer año, te hayas permitido retomar ciertas actividades y con ello encontrar nuevos espacios y momentos para relajarte, divertirte y sonreír (de nuevo, y aunque sea poquito).
Puede ser que este año encontraras nuevas formas de cuidar tu corazón, sanar tu mente, darle a tu cuerpo lo que necesita de alimento, movimiento y cuidado, o no, y ya sea momento de procurarlo un poco más, considerando que lo habitarás por un tiempo más y es el que te permite experimentar la vida.
Este año es posible que te aventaras a realizar proyectos nuevos o a darle conclusión a temas pendientes o puede que por avanzar en ciertas cosas otros se quedaran en pausa, es importante revisar si queremos traerlos al nuevo año y para qué, de tal forma que nos den dirección a nuestros pasos.
Me parece que darnos cuenta de con lo que contamos, con lo que hicimos y lo que quedó por hacer nos da pistas de como vamos transformándonos, qué nos falta por trabajar y en qué necesitamos enfocarnos más para alcanzar lo que deseamos o necesitamos.
No somos proyectos terminados, ni en un año se puede realizar todo, pero si podemos ir reconociendo y abrazando nuestras experiencias para fortalecernos y encaminarnos a nuestro futuro yo y una vida presente más rica, y tal vez, más divertida.
Y tú, ¿cómo fuiste este 2022?
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