Salud

La adicción a los videojuegos puede traer problemas mentales

Redacción: Antonio Villeda  

Vivimos en una época donde la tecnología es parte esencial de nuestras vidas, no solo para poder trabajar, sino también para poder entretenernos en nuestros tiempos libres. Los videojuegos han ganado mayor popularidad últimamente, lo que ha provocado que aumente el número de usuarios que los juegan y los utilizan como un refugio. 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha incluido el trastorno por uso de videojuegos en la Clasificación Internacional de Enfermedades. Este trastorno se puede identificar, ya que quienes lo padecen ponen a los videojuegos por encima de otras prioridades, pueden sentirse irritables por no jugar y pueden deteriorar sus relaciones personales o académicas.  

Estudios han demostrado que el exceso de jugar videojuegos puede traer síntomas de depresión y ansiedad, así como una dependencia emocional que genera aislamiento y dificultades para la regulación emocional. Además, puede provocar insomnio. Algunas de las prevenciones para evitar este trastorno son: establecer un tiempo limitado para jugar, hacer actividades que no impliquen el uso de pantallas y promover la interacción social. 

Sin embargo, no siempre son perjudiciales, ya que se ha demostrado que pueden mejorar la coordinación, la resolución de problemas y la creatividad. También pueden proporcionar información sobre temas en específico e, incluso, en ciertos casos, pueden contribuir a la salud. Un ejemplo de esto es el juego Sea Hero Quest, que ayuda a identificar si una persona tiene riesgos de padecer la enfermedad de Alzheimer.